La seguridad inalámbrica – TP-LINK
Como en cualquier ámbito de la actividad humana, la seguridad es importante al momento de armar una red inalámbrica. Existen riesgos potenciales para cualquier usuario que se conecta a una red sin cables, en las empresas y los hogares uno de los bienes con mayor valor es la información. Después de todo ¿A quién le gusta que extraños tengan acceso a sus fotos, videos o historial de facturación?
Es importante mencionar que de acuerdo a la encuesta Global de Delitos Económicos 2011 de PricewaterhouseCoopers (PwC) cuatro de cada 10 empresas mexicanas sufrieron actos criminales al interior de sus oficinas. Los países con los niveles más altos de delitos que se reportan son: Kenya, 66%; Sudáfrica, 60%; Inglaterra, 51%, Nueva Zelanda, 50%; España y Australia, 47%; Argentina y Francia, 46%; Estados Unidos y Malasia, 45%, y México con 40%.
Por ello, es importante que la red inalámbrica sea asegurada y protegida. Hay algunas acciones fáciles de implementar para aumentar la seguridad en la red inalámbrica y, de esta manera, reducir los riesgos.
La primera acción que debe llevarse a cabo, es cambiar la contraseña del administrador en el ruteador inalámbrico. Los criminales cibernéticos consiguen las contraseñas predeterminadas de los fabricantes de dispositivos inalámbricos y las usan para intervenir las redes inalámbricas. Es importante utilizar una contraseña que no se pueda adivinar fácilmente.
También, se recomienda apagar la transmisión SSID (Service Set Identifier) para evitar que el dispositivo inalámbrico haga saber de su existencia cuando se busquen redes inalámbricas disponibles.
Cambiar el nombre predeterminado SSID del dispositivo (InfinitumXXXX, MotorolaXXXX, Arris54G). Para un criminal cibernético es sencillo encontrar el nombre predeterminado por el fabricante y utilizarlo para encontrar redes inalámbricas vulnerables.
El activar algún tipo de codificación o encriptación en la trasmisión de los datos del ruteador, tales como WPA, WPA2 o WEP y modificar la contraseña por lo menos una vez al mes.
Lo peor que le puede suceder a un usuario es creer que su red es segura, lo cual amplía las posibilidades que tenga alguna vulnerabilidad que pueda ser explotada y su información, robada.
Una de las principales ventajas de las redes inalámbricas es la reducción de costos, si se le compara con una red cableada, sin embargo, para este tipo de red debe contarse con seguridad más robusta y más exigente para evitar disgustos.
Además de las características mencionadas anteriormente, el usuario debe asegurarse que el equipo que está instalando en su casa u oficina ofrece el mejor desempeño, apoyado por un buen servicio al cliente y contar con una política de garantía clara.
Por Víctor Checa, Gerente de Soporte técnico, TP-LINK México