China se prepara para desplegar su imponente portaaviones con tecnología de catapultas electromagnéticas
Este verano ha sido realmente movido para la Armada china, con preparativos que están sacudiendo las aguas internacionales. Sus avances tecnológicos han despertado la curiosidad global, especialmente con el portaaviones Fujian, que está a punto de convertirse en un nuevo protagonista en la escena naval. La innovación clave de esta gigantesca embarcación radica en sus catapultas electromagnéticas, una tecnología que promete llevar las capacidades de la Armada china a un nivel superior.
China ha mostrado indicios de estar finalizando las pruebas de campo del Fujian, incorporando este sistema vanguardista que no solo reduce la carga mecánica sobre los aviones, sino que también promete un mantenimiento más sencillo y con menos requerimientos de espacio. Con estas catapultas, la posibilidad de lanzar aviones más pesados y repletos de combustible se vuelve una realidad. Aunque aún no hay confirmación oficial sobre el inicio de estas operaciones, las imágenes recientes sugieren que los preparativos están muy avanzados.
La colocación del Fujian en el mar no es solo un hecho aislado, sino parte de un movimiento estratégico de China para aumentar su influencia en el Mar de China Meridional. La región es de gran importancia geopolítica y militar, compartida por países como Taiwán e India, y vigilada de cerca por potencias como Estados Unidos. En este escenario, tener un portaaviones equipado con EMALS (sistemas de lanzamiento de aviones electromagnéticos) coloca a China en una posición más competitiva e intimidante.
Con el 80 aniversario de la derrota japonesa en la Segunda Guerra Mundial a la vuelta de la esquina, se especula que China podría utilizar este evento como plataforma para exhibir sus nuevas capacidades navales. Todo apunta a que estos desarrollos no solo afianzan una narrativa de poderío militar, sino que también son un recordatorio de la influencia china en la región. A medida que nos acercamos a esta fecha clave, el mundo observa con interés para ver qué revelaciones y demostraciones públicas ofrecerá China.
